Si en el voleibol ya nos ha quedado claro que la RFEVB  busca la máxima implicación posible por parte de clubs y jugadores, en el vóley playa ya llevan un tiempo siguiendo esa misma filosofía.  Los dos programas permanentes que hasta ahora llevaba a cabo la RFEVB, el de tecnificación en el CIVP de Lorca y el de alta competición, están haciendo que parejas como Paula Soria y Belén Carro o los hermanos Huerta puedan compaginar su participación en campeonatos internacionales con sus estudios, o que Liliana Fernández y Elsa Baquerizo,  Pablo Herrera y Adrián Gavira, puedan seguir mejorando sus carreras deportivas en el vóley playa internacional.

Plata y bronce para las parejas españolas en el Europeo sub 22

 

 

Al programa de tecnificación, como explica el director técnico de la RFEVB, Luis Muchaga, “se invita a los deportistas a participar porque por sus características técnicas o psicológicas pueden llegar a alcanzar objetivos, que pueda llegar a ser un deportista nivel World Tour. Se busca voluntad, determinación y técnica”. Es una apuesta por ellos, por los deportistas, para buscar y conseguir un futuro prometedor. La concentración permanente de tecnificación de Lorca, está compuesta por chicas y chicos con edades entre los 16 y 20 años, “porque esas edades son las que están en el top de la competición internacional”, recalca Muchaga. Es un programa de convivencia, académico y deportivo. Son «diez u ocho meses al año«, durante el curso escolar. Para la Federación, según su director técnico, “el margen de error es muy alto, pero hay que tratar de equivocarse lo mínimo, porque la inversión por cada deportista es muy alta”.

El programa de alta competición podría compararse con las selecciones absolutas masculinas y femeninas de voleibol. “Son equipos de ámbito internacional que la Federación apoya para su competición en el ámbito internacional”, matiza Muchaga. Hasta ahora, esos puestos los han ocupado Lili y Elsa, Herrera y Gavira y Amaranta Fernández y Ángela Lobato. “Es muy selectivo, los que vayan a ir a los juegos olímpicos. Los que podrían tener perspectiva en un campeonato del mundo”, así define el federativo este programa. “Son equipos que ya han demostrado rendimiento a nivel internacional, en World Tour y que tengan una perspectiva de participar en un campeonato del mundo, de Europa o en unos juegos olímpicos”, aclara el técnico.

 

NUEVO PROGRAMA EN EL CIVP DE LORCA

La primera de las novedades para este año es un programa escalón que esté entre los dos existentes: el de alto rendimiento. Estará también localizado en Lorca, como base, “no como el programa de alta competición que está deslocalizado”, y atenderá el escalón intermedio entre la tecnificación de categorías inferiores y la alta competición internacional. “Lo haremos con deportistas que ya han pasado por categorías inferiores y que tengan perspectivas de ser jugadores de World Tour y el día de mañana de ser olímpicos o mundialistas”, explica Muchaga. Según ha podido conocer Comunidad Vóley, esas parejas, por el momento, serán Sergi Reñé y César Menéndez, los hermanos Huerta y Paula Soria y Belén Carro. Un futuro relevo para las actuales parejas olímpicas.

La otra novedad está en la disolución de la pareja formada por García-Mesa y la formación de una nueva, Christian García e Inocencio Lario serán quienes también representen a España internacionalmente. Comunidad Vóley  también ha podido saber que la RFEVB está viendo de qué forma puede apoyar a estos jugadores cuyos objetivos pasan por la participación en el mundial y otras grandes pruebas internacionales y los cuales, a día de hoy, no están ubicados en ninguno de los programas de la RFEVB.

Actualmente, como explica Muchaga, “toca focalizarse en las parejas de alta competición y en su clasificación olímpica que comienza ahora en octubre”. Y esa es una de las razones por las que la Federación ha creado este nuevo escalón para llegar a lo más alto. “La RFEVB tiene también que vislumbrar que va haber vida después de Herrera-Gavira y después de Lili y Elsa. Esa es mi responsabilidad, la responsabilidad de la RFEVB”, se sincera el director técnico.


Elsa Baquerizo y Liliana Fernández

El vóley playa español vive uno de sus mejores momentos, prueba de ello son los 4º y 5º puestos de las parejas femeninas en el Campeonato de Europa, o el 5º puesto del ranking mundial que ocupan Herrera y Gavira; si además tenemos en cuenta esta apuesta por el futuro, ¿veremos en algún momento una prueba internacional en España con nuestras parejas olímpicas?

Adrián Gavira y Pablo Herrera

Respecto a la demanda de competiciones internacionales de vóley playa en nuestro país, la respuesta de la RFEVB es clara: “la voluntad es buscar opciones en España de volver a organizar pruebas internacionales, el problema es que todavía no lo hemos encontrado”. El director técnico nos comenta que tras la última conversación mantenida con la FIVB, esta esperaba empezar al año que viene con torneos de cuatro y cinco estrellas, pero los costes son muy altos por lo que el movimiento más inmediato de la RFEVB pasa por “buscar socios que no quieran empezar tan altos y que se conformen de cara a su visibilidad con una, dos o tres estrellas para empezar”.


LA TELEVISIÓN SÍ ACOGE AL VÓLEY PLAYA

Dice Muchaga que “en televisión se ha visto más vóley playa en verano que la selección durante todo el año”. Y es que ya nos lo dijo el periodista Alberto Sierra en los Juegos del Mediterráneo: el vóley playa es un deporte más espectacular y televisivo. La estrategia de la Federación desde hace unos años ha sido que, con una empresa como Madison, el vóley playa español se haya convertido también en un espectáculo. “Madison lo está haciendo bien y hacen que el público sea parte del espectáculo”, comenta Juan Pedro Sánchez, Secretario General de la RFEVB. Otro de los puntos a favor para que sea televisivo es el tiempo, que según Sánchez, “es más conveniente que el del voleibol”. El espectáculo sin duda va de la mano del vóley playa, pero “la RFEVB recibe una subvención del Consejo Superior de Deportes del 50% menos que hace unos años y los recursos son limitados” por lo que “si me los gasto en espectáculo puede haber carencias en otras cosas”, sentencia el secretario general.

 

Rosa Royo y Pilar Barbó