A poco menos de un mes para que comience la competición nacional de voleibol, todavía nos queda tiempo para prepararnos y sentarnos a leer conclusiones que, en nuestra visita a la Real Federación Española de Voleibol, nos dieron Luis F. Muchaga, Director Técnico de la RFEVB, y Juan Pedro Sánchez, Secretario General de la RFEVB. Ellos nos hablaron de la realidad, desde el punto de vista federativo, de las dos ligas más importantes del voleibol nacional, la Superliga Masculina y la Superliga Iberdrola.

Ambos protagonistas de nuestra charla coinciden en que los clubes de las primeras ligas del vóley están haciendo un gran esfuerzo por mantenerse e incluso mejorar día a día para conseguir plantillas competitivas y resultados dignos de su trabajo y dedicación. Sin embargo, todavía queda mucho camino para ser una liga competente con capacidad de hacerse un claro hueco en Europa.

 

 

SUPERLIGA MASCULINA 

En la categoría masculina, según reconoce Muchaga, aunque la base de la cantera es pequeña, “los clubes han sido capaces de conformar plantillas, contando con jóvenes talentos, contratando extranjeros y siguiendo planes de trabajo buenos para una liga que va siendo cada día más competitiva”. Como en todos los deportes, siempre hay un rey de la baraja, clubes que cuentan con mayores presupuestos y que terminan ocupando los altos puestos de las clasificaciones, aunque el director técnico está convencido de que este año “la cosa ha sido equilibrada”.

El siguiente paso, dice el responsable federativo, es “animarse a competir más en Europa”. En los últimos años se han perdido plazas porque los equipos españoles no participan, pero Muchaga no les culpa: “es el reflejo de la realidad del voleibol”. Tiene esperanzas con la vuelta del Club Voleibol Teruel a Europa, y se lo agradece. No sabemos si su vuelta a la competición continental o el esfuerzo del club turolense en buscar una financiación extra para poder volver a la máxima competición europea. La realidad del voleibol.

 

 

SUPERLIGA FEMENINA

La Superliga – hasta hace poco conocida como femenina “a secas” – Iberdrola, parece vivir otra realidad diferente, y no solo por llevar ese apellido y por consiguiente un contrato de patrocinio detrás. Muchaga considera que en esta categoría “hay desde clubes profesionales a otros que interpretan su participación en la competición de Superliga como una oportunidad para deportistas en formación, pero sin una vocación de aumentar día a día sus rendimientos y que no pasan por una mayor dedicación”. A veces se achacan estos casos a la incompatibilidad con la formación académica, lo cual consideran un error: “no es incompatible con la formación académica, porque se pueden tener otros ritmos de estudio y tenemos que entender que para crecer deportivamente tenemos que pasar a planteamientos deportivos más exigentes”.

Por eso, la relación federación-clubes debe ser continuada. “Hay interlocución cercana con ellos. Hay una comisión de clubs integrada por representantes de clubs que asesoran al presidente sobre cuestiones relativas a las ligas”, describe el director técnico, quien continua con la forma de trabajo que tienen con los componentes de la liga: “nuestro discurso con los clubs es ir en esa línea. Sabemos que no se puede ir de 0 a 100 en segundos, pero el crecimiento tiene que ser progresivo”. A ellos, a los clubs, le dejan la tarea del crecimiento técnico y les instan a ser más exigentes respecto al rendimiento de los deportistas. “Solamente si la exigencia técnica es alta, lo será también el crecimiento de ese deportista”, confiesa Muchaga.

Exigencias que en algunos casos se cumplen, pero no se ven recompensadas, como en el caso de Aguere, el cual, Muchaga dice desconocer. Sin embargo, su solución ante estos casos es dejar claras las condiciones de un equipo desde el principio. “A los jugadores que vienen a la selección les anuncio cuales son las condiciones claramente y las cumplimos estrictamente”, menciona el director técnico, quien añade que “el deporte es una cuestión de ponernos de acuerdo y una vez que nos ponemos de acuerdo, la demanda de tu rendimiento es máxima”.

Iberdrola, patrocinador femenino

Sin embargo, es esta liga, la que menos profesional ve Muchaga de las dos, la que tiene un patrocinio detrás. A través del programa Universo Mujer de Iberdrola y con la ayuda del Consejo Superior de Deportes, la Superliga Iberdrola se ve beneficiada de un gran apoyo. “Hoy en día, hay unas posibilidades económicas fuera de lo que son los presupuestos y subvenciones ordinarias que son orientadas al deporte femenino”, declara Juan Pedro Sánchez, Secretario General de la RFEVB. Más femenino que masculino, el voleibol “aprovecha esas ayudas y esos programas” para seguir manteniéndose como un “deporte fuerte a nivel de base”, según vaticina Sánchez.

Un patrocinio, que está dando visibilidad al voleibol femenino, pero que muchos clubs no notan, económicamente hablando. Algunos clubs consideran que, aun con el patrocinio, el dinero que tienen que pagar a la federación para competir sigue siendo igual que el previo a la llegada de Iberdrola al vóley. Sin embargo, la federación lo justifica refiriéndose a la visibilidad necesaria para que cualquier empresa que esté apostando por un deporte, siga haciéndolo. “Estamos intentando hacer pedagogía con los clubes, de reinvertir ese dinero porque ahorrándote unos costes, si luego no van a dar visibilidad al patrocinador, al final puede que no le interese”, explica Sánchez. Además, son de los que piensan que reutilizando ese dinero, que posiblemente podrían ahorrarse “se pueden conseguir otros patrocinios y sirven para que las instituciones que apoyan en tu ciudad vean que este es un deporte importante frente a la competición de otros deportes”.

Mientras, la Superliga Masculina sigue buscando un gran patrocinador como el de la femenina. Eso solucionaría que se pudieran televisar también partidos de la Superliga Masculina, pero como reconoce Juan Pedro Sánchez, “una parte del esfuerzo para poder realizarlo tenía que ser con ayuda de los clubes y al final no salen los números”. A eso hay que añadirle otro problema, según explican desde la federación y es que TVE tiene una política de equiparar emisiones femeninas y masculinas, y “como masculinos hay otros deportes, tienen que buscar cupos de femenino”, sentencia el secretario general.


“es el reflejo de la realidad del voleibol”


El voleibol en televisión.

Es la televisión, otro de los puntos de este patrocinio, la que trae a la federación de cabeza. Este año, cada lunes se ha emitido en Teledeporte un partido de la Superliga Iberdrola. “El coste de la producción de las emisiones lo han cubierto con el patrocinio de Iberdrola, parte de los clubes y una parte de la federación”, determina el secretario general, quien añade que “corremos un riesgo ahí si no conseguimos más patrocinios, pero entendemos que es una inversión de los clubes para que se les reconozca a ellos y a las deportistas para que los vean”.

Son muchas las pautas a seguir para que un partido de la Superliga, tanto femenina, actualmente, como masculina en un futuro, se pueda llegar a emitir. El partido de chicas que se ha estado emitiendo en Teledeporte los lunes ha sido así, en diferido, por la propia política de parrilla de Teledeporte. Cuando la federación planteó la emisión de un partido a Teledeporte, la cadena observó la duración de los partidos, que nunca es la misma, a veces pueden superar las dos horas y otras terminar a los 65 minutos. “Si tienes planificado dos horas y termina en 65 minutos, es imposible fijar un partido en directo, porque modifica toda la parrilla, y si pasan de dos horas puede que ellos corten emisión y el público se queje”, revela Sánchez. Esa es la razón por la que se apostó por ir en diferido, algo que, respecto a audiencias, no han notado mucha diferencia con las de los partidos en directo.

¿Y los chicos? Desde la federación han llamado a todas las puertas. Movistar, Eurosport y Gol TV. En los tres casos, los costes de producción tenían que asumirlos por completo la federación, con una aportación, como se hace con las chicas, de los propios clubs. “El coste de producción de una liga son 300.000 euros”, declara el secretario general, y son los clubs los que, viendo las audiencias que tiene Eurosport, por ejemplo, que no son grandes, “prefieren seguir apostando por el streaming”. El problema sigue radicando en la visibilidad. “Si conseguimos patrocinios se puede hacer”, explica Sánchez, quien asegura que, de momento, Teledeporte está ahí, “pero no está en condiciones de garantizar una visibilidad porque tiene muchos compromisos”.

En el horizonte más próximo, la retransmisión de las finales de los playoffs de chicos. “Eso lo asumiríamos nosotros de una manera u otra, pero al coincidir los playoffs de muchos deportes más que el nuestro, hay que ponerse de acuerdo con los clubs”, reconoce el federativo, para concluir con una propuesta optimista: “las finales de Copa del Rey y Copa de la Reina y finales de playoffs, si hay hueco en televisión, nosotros nos comprometemos ya a emitirlos”.

 

Rosa Royo y Pilar Barbó.