Hace una semana, mientras que en Palma de Mallorca se disputaba la categoría femenina, los cuatro mejores equipos de la primera vuelta de la Superliga Masculina 2 disputaban el torneo del K.O. en Badajoz.
Aparth. MM Badajoz (como anfitrión), Mediterráneo Castellón, Tarragona SPSP y Emevé que podía hacer historia si lograba, por segundo año consecutivo, la Copa Príncipe.
El equipo Mediterráneo Castellón afrontaba la Copa Príncipe como un regalo, gracias a su esfuerzo en la primera vuelta. A comienzo de temporada tenían dos objetivos bien marcados que no eran otros que la permanencia y lograr alcanzar la mitad de tabla. Por lo que fueron a Badajoz cargados de ilusión.
“Fuimos a disfrutar la Copa. Somos un equipo joven, con mucha inexperiencia y para muchos fue una evento totalmente novedoso, ilusionante e inolvidable” nos explicaba Vicente Monfort, el jugador con más experiencia copera dentro del conjunto castellonense, ya que anteriormente había disputado una Copa también con Mediterráneo y otra con la Universidad Politécnica de Valencia. “Pero la sensación fue como el primer día”.
Después de afrontar el primer partido, las percepciones en el vestuario valenciano no podían ser mejores: “habíamos hecho el trabajo que teníamos que hacer. Nuestro objetivo en La Copa era jugar contra el anfitrión. Iba a ser una olla a presión y sudamos sangre y lágrimas para poder llevarnos la victoria. Nos vimos en la final con un equipo como es el de Lugo, que quiere ascender… La verdad que la semifinal contra Badajoz nos había dado anímicamente un empuje.”
Los de Mediterráneo Castellón se habían metido en la final contra el vigente campeón, Emevé, por lo que sabían que no iba a ser un partido fácil: “era un aliciente jugar contra Emevé, son jugadores de Superliga, tienen un proyecto muy ambicioso para subir, no han perdido ni un punto en toda la liga y estaba complicado. La verdad que empezamos muy fuertes, ganando el primer set. El segundo lo tuvimos ahí, 22 iguales, y no supimos cerrar el set. Ahí se nos fueron un poquito las opciones reales que teníamos porque ese set nos apagó un poco y ellos, que no habían conseguido entrar en el partido porque habíamos empezado muy fuerte, consiguieron revertir la situación y remontar el partido. Ya no tuvimos más opciones”, analiza Monfort, que añade: “el enfrentamiento creo que fue digno de una final.”
Para el jugador valenciano una imagen vale más que mil palabras y la que nos muestra expresa todo lo que para él ha sido la Copa Príncipe 2019: “nunca un segundo puesto supo tan bien, porque somos un equipo de gente que se conoce de toda la vida, jugadores de la casa con dos refuerzos: Pol que es un central de 1º nacional y está jugando en SMV2, y yo que soy un jugador con un poquito más de experiencia en el grupo. Vengo ayudar y a aportar, disfrutando como cuando era un juvenil. Estoy encantado, con el entrenador, con el grupo y la verdad que la sensación de la Copa ojalá la podamos jugar 20 mil veces más y de la misma manera. El grupo cuando está unido se nota. Lo hemos disfrutado todo y hasta Marc Marín, que está con muletas y es una baja importante para nosotros, ha estado ahí en todo momento, arengando al equipo, ilusionado con el grupo, creo que hay que destacar el gran grupo humano que tenemos, que es sensacional y estoy encantado de poder formar parte de esta familia.”
La Copa Princípe 2019 la ganó Emevé y logró hacer historia en el torneo al ser el único equipo en alzar el trofeo por segundo año consecutivo. Puedes escuchar las sensaciones previas de Víctor Bouza, de nuevo MVP en la entrevista realizada para el podcast: AQUÍ.
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