Verano es sinónimo de selecciones así que en Comunidad Vóley hemos cogido las maletas y nos hemos ido hasta Corea en nuestro primer “Destino: Vóley” de 2019.

Allí hablamos con César Hernández, entrenador asistente y preparador físico del equipo italiano Savino del Bene Scandicci hasta la pasada temporada. Ahora, en verano, ocupa el puesto de segundo entrenador en la selección coreana, algo novedoso contar  tanto extranjero entre sus filas. ¿Su día a día en Séul? César Hernández lo resume fácilmente, “por la mañana entrenamiento de pesas y técnica y por la tarde mucho trabajo de balón, dos o tres horas, buscando entender la filosofía de juego que tienen las jugadoras e intentar implementar nuestras ideas.”

  • El gran objetivo es llegar a Tokio 2020 ¿Cómo se trabaja para llegar a unas olimpiadas?

César Hernández: “Objetivo Tokio 2020 es el más importante y hay que trabajar para lograrlo, conseguir que las mejores jugadoras de Corea estén en la selección. Ahora, para la Voley National League empezamos con un equipo joven y poco a poco se incorporarán otras más fuertes, en agosto nos enfrentaremos a Rusia, el rival más duro, y si no lo conseguimos, en enero, hay otro clasificatorio. En función del clasificado oriental en verano, si China o Tailandia, sabremos cuál es el rival a batir.”

  • ¿Cómo te llegó esta oportunidad?

C.H.: “La oportunidad llega durante este año en Italia, cuando contacta conmigo Stefano Lavarini, el entrenador con el que estoy aquí. Él ha ganado dos temporadas en la liga brasileña. Le hablan bien de mí diferentes entrenadores de Italia, el seleccionador  italiano,  Giovanni Guidetti, de mi polivalencia para  poder trabajar como asistente, preparador físico, poder ayudar como scout  y al final todo esto le hizo decidirse por mí.”

  • Personalmente, ¿qué supone este proyecto?

C.H.:Personalmente, me supone poder empezar a tocar con los dedos el sueño de estar en una olimpiada. Desde que empecé a entrenar allá por 2001, me metí en la cabeza que en algún momento tendría que estar en unos J.OO. con el staff, me hubiera encantado estar con la selección española pero, a día de hoy, eso es muy complicado. Aquí, con la selección coreana, como la clasificación se hace por continentes, tenemos el camino algo más allanado, pero es igualmente difícil ya que al final en las olimpiadas quiere estar todo el mundo y entonces nadie lo pone fácil.”

  • ¿Qué es lo que más te ha llamado la atención desde que llegaste a Corea?

C.H.:Lo que más me ha llamado la atención es el respeto que tienen las jugadoras a la figura del entrenador y lo dispuestas que están a trabajar. Nos hemos encontrado un grupo de gente joven, quizá con un tono físico algo bajo para lo que demanda el vóley internacional de primer nivel, pero tienen muchas ganas de trabajar, respetan mucho lo que los entrenadores le dicen y prueban a hacer las cosas, que creo que es lo más difícil. Porque cuando tú tienes que probar hacer cosas nuevas es porque no te están saliendo o no sabes hacerlas, y para aprender a hacerlas: probar. Ese probar genera errores, pero a la larga generará la adquisición de nuevas habilidades. En ese sentido estamos muy contentos.”

Cuando busca diferencias y similitudes entre el trabajo en la liga italiana y la selección de Corea, César nos comenta que «son dos culturas diferentes, dos formas de entender la vida diferentes, dos formas de entender el voleibol diferentes, entonces, en Italia es una liga de muy alto nivel en la que hay una mezcla de jugadoras en los equipos de muchas partes del mundo, y con esa diferencia de culturas también hay un enriquecimiento grande, tanto en lo laboral como en lo humano. Aquí son todas coreanas y nosotros somos el primer staff extranjero que han tenido, hasta ahora todo han sido coreanos, en la liga coreana solo hay una jugadora extranjera por equipo, aquí está Milagros Collar, por ejemplo. Eso les hace estar un poco cerrados a su forma de trabajar, de entender las cosas, y no se han abierto demasiado a lo que hay fuera. Nuestra llegada supone un poco de aire fresco, abrir una ventana que renueve un poco las ideas.»

Si hablamos de las diferencias entre Corea e Italia, selección-club, es inevitable preguntarle por las diferencias de su actual selección con la española, grupo con el que el madrileño ha trabajado durante muchos años. “Ahora mismo en Corea en cuanto a ranking está en 9º, disputamos la VNL y en septiembre la Copa del Mundo, competiciones que la selección española no puede acceder. Luego estamos clasificados a los Juegos Asiáticos, que es como el campeonato de Europa, donde intentaremos alcanzar alguna de las medallas. Estamos en la lucha de estar en unos JJOO, en Londres 2014 consiguieron el 4º puesto. Estamos hablando de dos selecciones que por historia tienen numerosas diferencias.”

 La próxima temporada  cambia de banquillo, no seguirá en Italia, “han cambiado de entrenador, el club quería que continuase pero he decidido abrir un poco la ventana y ver qué aire fresco entra” (un vendaval, quizá) “estar ahora en Corea dificulta un poco las cosas porque termino muy tarde, a primeros de octubre las ligas están para empezar y en enero tenemos el preolímpico si no clasificamos. He tenido contactos bastante interesantes. En algún lado voy a estar, de eso no me cabe ninguna duda.”

 

  • ¿Y volver a España, cómo lo ves?

C.H.: “Volver a España ahora mismo es complicado. No busco ofertas porque no me obsesiono demasiado con que no voy a tener nada al año siguiente, con que tengo que hablar con la gente, con que tengo que tener un manager y esas cosas y me dedico hacer mi trabajo y ese trabajo está haciendo que la gente hable muy bien de mí. Durante estos años ese trabajo ha hecho que el voleibol italiano me trate como uno de los suyos y eso hace que se me abra mucho campo en otros sitios y que la gente me pregunte. Ahora mismo volver a España lo veo difícil, volvería si no tuviera nada por aquí, pero para tomar un tiempo de stand by.”

Pero aunque su idea de regresar a casa quede lejos, César no pierde de vista la competición española, “tengo amigos dentro de la Superliga Masculina, jugadoras de selección española, les escribo, me intereso. Al final es el sitio de donde salgo y sigo a diario la competición española.” Y cómo no, el momento actual de la selección femenina, “fue un motivo de satisfacción para todo el mundo. Con ‘Pascu’ (Pascual Saurín, seleccionador femenino) iniciamos un proyecto hace bastantes años con la idea de devolver a España a un Campeonato de Europa, hubo un relevo generacional que no fue fácil, tuvimos que afrontar competiciones de mucha tensión con jugadoras que internacionalmente no tenían mucho bagaje, y este preeuropeo ha sido la consecución de ese proyecto y me alegré mucho. Sobre todo por ‘Pascu’, ya que se está dando en cuerpo y alma en meter el voleibol español lo más alto posible y tener a gente así trabajando en el voleibol nacional es de agradecer.»

Valora como algo «fundamental, que las jugadoras españolas puedan vivir la experiencia de un Campeonato de Europa, puedan jugar con las mejores de Europa, eso al final te hace crecer. Aquí no hay otra forma de crecer que compitiendo con las mejores. Eso no solo te lo da el Campeonato de Europa, sino que previamente al Campeonato de Europa se pueden disputar algunos torneos amistosos con selecciones que si no estás clasificados para el europeo, ni te llaman, entonces, entras en una dinámica de competición en la que luego es más fácil quedarse.»

Para terminar, si durante esta entrevista se le ha despertado la curiosidad sobre el voleibol en Corea, o quiere saber más acerca de César Hernández, tranquilos, porque comparte en sus redes sociales su trabajo, es cercano y abierto: “intento mantenerme en contacto con todo el mundo, siempre invito a todo el mundo a que venga, (esté en el país que esté) a que vea vóley, hable conmigo… como dicen por aquí ‘Kam sa ham ni da’ y nos vemos en las pistas.”

 

Miriam Escuín