DEPORTE EN VERANO: CÓMO EVITAR LOS GOLPES DE CALOR

Con la llegada del verano aumentan las ganas de practicar deporte al aire libre. El buen clima y disponer de más tiempo, son dos factores que nos animan a salir del gimnasio a la hora de hacer ejercicio.  Por ello debemos tener cuidado y tomar algunas medidas si no queremos sufrir golpes de calor.

La primera de ellas es evitar las horas de máximas temperaturas, entre las 12:00 y las 18:00. Pero todos sabemos que a la hora de participar en ciertas competiciones, esta media, resulta imposible de llevar a cabo. Por ello hablaremos de otras que sí podemos realizar y que no debemos olvidar.

 

 

 

Alex Lamata, o como le dieron a conocer en el programa radiofónico Anda Ya, «Sargento Lamata«, es preparador físico y en esta sección contaremos con sus consejos para una buena práctica del deporte.

 

 

 

 

 

 

HIDRATACIÓN, HIDRATACIÓN E HIDRATACIÓN.

Lo más importante es la hidratación, antes, durante y después de  practicar ejercicio. “Beber cuando se tiene sed es tarde. La sed es una alarma del organismo que dice Eh! Qué me falta hidratación.”

 

Como nos explica Alex, la hidratación debe ser constante ya que tenemos que reponer todos los líquidos que perdemos a través del sudor, nuestro termorregulador que nos permite reducir la temperatura corporal cuando esta aumenta por la práctica de ejercicio. “Si llevamos una correcta alimentación, lo indicado es hidratarse con agua previo y durante el ejercicio. Al finalizar lo haremos con bebidas isotónicas para favorecer la recuperación y aportar sales minerales a nuestro organismo.” ¡Ojo! No debemos abusar de ellas ya que contienen azúcar.

 

La deshidratación lleva consigo una disminución del rendimiento físico que puede aumentar el riesgo de lesiones y poner en juego la salud del deportista.  Voleibol, tenis, baloncesto…  son muchos los deportes que disponen de varias pausas durante el juego que nos permiten mantener una correcta hidratación.

 

COMPETICIONES A ALTAS TEMPERATURAS.

Si tenemos que jugar algún torneo o partido entre las horas de máximas temperaturas en el día, Alex nos aconseja prepararnos previamente para ello. “Es importante haber entrenado en las condiciones a las que vamos a jugar para preparar nuestro organismo a los esfuerzos propios de la competición. Quizás no todos los entrenamientos, pero sí en determinadas ocasiones para que el cuerpo sepa lo que le espera y competir a altas temperaturas no sea una novedad.”

 

Mareos, náuseas, vómitos, visibilidad borrosa, fuerte dolor de cabeza o desorientación, son algunos de los síntomas que podemos sufrir cuando nuestro cuerpo se deshidrata. En caso de sentir alguno de ellos o no encontrarnos bien, no hay que dudar en parar el juego, buscar un sitio donde poder recuperarnos a la sombra y con temperatura más suave, y pedir asistencia médica si es necesario.